23 oct 2011

My Murder: Capítulo 12

"Y pude haberme quedado contigo toda la noche, de haber saber cómo salvar una vida"
(The fray "and I could have stayed up with you all night...")


Cerré los ojos, me acurruqué al lado de Frank llevando mis rodillas al pecho.
-…me hubiera quedado despierto contigo toda la noche, de haber sabido cómo salvar una vida…--escuché que cantaba…

No podía creerlo, estaba llorando con él. Miré mis piernas. Todo comenzó a darme vueltas.

Para cuando me di cuenta, yo ya no estaba sentada sobre la cama de Frank. Volví a la misma nube donde me detuve hace un momento con Bob.

 Él estaba ahí, vi sus pies descalzos sobre  la suave nube.

-¿Qué haces, Scarlet?—preguntó después de unos segundos, pero no respondí. --¿Por qué lloras?
Descubrí mi cara.

-Sí. Lloro… ¿No puedo hacerlo?—sollocé.
-Claro que puedes—dijo sentándose al lado de mi—Pero no deberías. Ya se lo dijiste: estarás en un lugar mejor. Ya no llores, pequeña Scarlet.
-No entiendo por qué lloro.
-eso pasa cuando las almas están realmente conectadas.
-¿Ves? Entonces déjame llorar con él.
-No puedo
-¡¿Por qué no?!
-Porque si te dejo, harás que su problema lo hunda por completo. Lograrás que se deprima más. Imagínate: las dos partes de un alma completa deprimidos… ocasionarías que se vuelva un ser suicida, Scar. Harías que su sufrimiento se vuelva interminable. Y apuesto a que no quieres eso—me dijo posando de nuevo esos azules ojos sobre los míos.
-Pues… no
-bien, hoy aprenderás a ser fuerte, Scar—sonrió y de nuevo se esfumó.

Frank no era malo. Ahora lo sabía… Su madre se había casado con Mario diez años más tarde cuando el padre de Frank falleciera unos meses después de que él naciera. Pobre muchacho.
 No era culpa suya que Mario, en vez de ser un hombre honrado, resultara ser un asesino en serie.


 Hoy también me había dado cuenta de que él fue el único que estuvo ahí para mí… aunque yo jamás quise notarlo.
  Al saber esto veo que lo amo más que a cualquier otro ser en el planeta, incluso más que a mí misma, al ser claro una chica egoísta. No podía dejarlo sufrir.

  Y es que él me calmaba. Siempre estuvo ahí. Estuvo ahí cuando morí, y en vez de hacerme enojar, me sentí mejor. Estuvo ahí también cuando Gerard obedeció las órdenes de Mario y me tiró a la laguna del parque del pueblo. Estuvo ahí cuando tuve que enfrentar mi propia autopsia, también en mi funeral y mi entierro. Siempre quiso acompañarme…
  Soy yo la egoísta, porque en vez de agradecerle, me dediqué a maldecirlo por haberme dejado sin respiración.

Bob volvió a aparecer sentado a mi lado.
-¿Has recordado algo últimamente?
-realmente no…--dije ya sin lágrimas—Desde que fallecí, la memoria se me ha estado borrando, casi no recuerdo mi primer día de escuela. ¿Esto es normal?
-Sí. Es normal que comiences a olvidar tu vida humana ya que has fallecido, querida—contestó con nostalgia—Yo tampoco recuerdo lo que me sucedió a mí…
-¿Por qué preguntaste si recordaba algo sabiendo que comienzo a olvidar cosas?
-Porque normalmente, el último recuerdo que un alma en pena tiene es el que le da pistas para terminar su misión…
-tuve uno con la pequeña Scarlet. Me llevó a recordar lo que me habían hecho. Fue horrible.
-Ah, no… no hablo de un simple recuerdo. Hablo de que regresas al pasado para saber un poco más… para comprobar algo.
-¿Enserio? Todo esto me parece una película.
-Pero no puede serlo. No hay cámaras a tu alrededor…
-Lo sé. Ojala fuera una película, o un mal sueño. Pero sé que no lo es… no lo es.
-Lamento decir que no, Scarlet. Esto no es un sueño. Esta es la vida…
-¿Crees que ya deba tener algún recuerdo?

Después, Bob se quedó petrificado y escuché un chasquido. ¿Por qué siempre deben ser chasquidos y no una campanita o algo así? …



***

Estaba sentada sobre la banqueta de una calle cualquiera.
Mi cuerpo era menudo. Al parecer tengo nueve años.
La gente pasa sin notar que estoy aquí.
Mamá y papá no vienen a buscarme.
Ni siquiera mi hermana gemela se encuentra a mi lado.
¿Qué pasa?


Miro mis rodillas, están raspadas.
Tengo un pañuelo en la mano derecha y en la otra una tarjeta.
“Espero se mejore tu hermana pronto”
Dice con letras escritas en cursiva.
-¿De quién es esto? ¿Es mío?


Una mano toca mi hombro. Volteo, y a mis espaldas hay un niño un poco más grande que yo. Tiene una chamarra verde puesta y su capucha está sobre su cabeza. Sonríe tímido.
Sus ojos… me recuerdan a alguien.
-Hola, Scarlet—saluda
-Hola…Olvidé como te llamabas.
-No interesa. Oye, ya no llores ¿sí?—se sentó a mi lado y secó una lágrima que se desbordaba por mi mentón.

Diablos, enserio estaba llorando. ¿Dónde estoy?
 ¿Acabo de regresar al pasado como dijo Bob?

Me abrazó.
-Mi madre también  falleció. No te preocupes, Scar. Yo te voy a cuidar porque eso hacen los amigos. Aunque tu familia se vaya a donde las almas buenas van, yo me quedaré contigo.
Me dio un beso en la mejilla.
-Gracias—respondí de forma automática—Yo también pienso cuidarte. Perdón pero ¿por qué murió tu mami?
-¿tu hermana está mejor?—respondió evadiendo lo de su madre.
Su comentario me recordó a una niña pequeña llena de tubos sobre una camilla de hospital.
-Creo que no…--dije sollozando.
Volvió a abrazarme.
-No te preocupes—repitió—yo no creo que tú la hayas golpeado.
-¿Enserio? Es que todos me molestan diciendo que los moretones de su espalda yo se los hice. La abuela también me cree.
-tú no harías eso. Yo sé que no harías eso…
-Gracias…
enserio no recordaba el nombre del chico.
-Siempre estaré ahí para ti, querida Scarlet.
-Gracias. Enserio… ahora debo irme.
-Adiós Scar…--se despidió después de ayudarme a levantar de la mojada banqueta.
 Me dio otro besito en la mejilla y luego tomó mi mano.
-Toma, antes que te vayas quiero darte esto—y puso un collar con una clave de sol en él sobre mi mano.
-¿enserio es para mí?
-Sí. Te quiero, no lo olvides.
-Claro que no… Frank

Soltó una carcajada.
-Recordaste mi nombre…



Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...